Lo siento, me voy.

Lo siento, me voy, se acabaron las mentiras edulcoradas y los nudos de clavos en la garganta que me hacías tragar.

Lo siento…me voy, lejos de tanto veneno, de tanto rencor pegado al papel pintado de las paredes, me voy antes de convertirme en un fantasma, antes de que el espejo me devuelva la imagen de “El Grito” de Edvard Munch.

Me voy con la piel hecha jirones y los ojos inundados sí, y con el pecho hundido haciendo difícil respirar es cierto, pero con fuerzas para irme, con ganas de alejarme.

Espero que seas muy infeliz en tu trocito de infierno, yo voy a buscarme si no un hueco en el cielo, una finca en el purgatorio donde no me moleste nadie.

Imagen sacada de Google, gracias Salo(mi Osita-chan).